Ir al contenido principal

A corazón abierto

 

Yo soy una persona un poco dual en cuanto a lo que mis emociones se refiere. Por un lado intento mantener una actitud serena, eso me ha hecho reafirmarme y fortalecerme; y por otro lado, cuando tengo mis momentos de introspección y pienso en todo, me doy cuenta de que soy muchísimo más sensible de lo que a la gente le muestro. Mis sentimientos son mi gran secreto, pero siempre están ahí esperando a salir, dejando ver que puedo ser de hierro y seda, todo al mismo tiempo.

Por naturaleza, yo siempre he sido una persona mucho más racional, pero cuanto más mayor me hago,  más me voy dejando llevar por aquello que siento. Me gusta ir con el optimismo por bandera porque me ha ayudado a afrontar todas las situaciones complicadas de mi vida. Pero eso no quita que en algunos momentos me puedan mis debilidades. 

En estos últimos meses tengo las emociones revolucionadas, por momentos de felicidad y también por otras vivencias que no lo han sido. Y en relación con esto, hay una frase de Jorge Bucay que me gusta y dice, “no somos responsables de las emociones pero sí de lo que hacemos con ellas”, lo que me lleva a la conclusión de que es inevitable sentir, pero cada emoción nos enseñará algo nuevo sobre nosotros mismos.

Me valgo de la escritura para entenderme mejor, y lo considero ese espacio donde dejar fluir mis pensamientos y emociones más puras. Esto me ayuda a no perder el norte y evito que las cosas se me queden dentro. Creo que cada persona debe encontrar su manera propia de gestionar su mundo interior.

Solemos pensar que somos invencibles, pero nada más lejos de la realidad, somos humanos. Algunas veces, por actuar con el corazón he cometido grandes errores que he pegado con creces, pero aún no saliendo como yo esperaba, he aprendido. Y es que en determinadas circunstancias es necesario desprenderse de algunas cosas para poder volver a renacer. Mi  forma de ser me lleva a poner el corazón y es por eso que no quiero dejar de ser fiel a mi misma. Así que ahora me encuentro en una etapa en la que para mirar al futuro con más fuerza debo conseguir una mejor versión de la que soy ahora mismo.

La mente limita y el corazón libera, quién mira dentro, despierta.

Comentarios

Traductor